Reflexión Tic

Es un hecho cierto que los jóvenes de estos tiempos, manejan la tecnología aún mejor que los mismos adultos. Es por ello que el uso de la tecnología constituye una fortaleza y una oportunidad susceptible de aprovechar, para impartir conocimientos en forma amigable, flexible y amena, por lo cual el aprendizaje resulta útil y oportuno. Es indudable entonces que la incorporación de la tecnología en las aulas constituye un reto interesante en pleno siglo XXI, pero también exige que se den determinadas condiciones para su éxito y que Echeverría (2001, citado por Marqués, P, 2008) resumió de la siguiente manera:

 Exige nuevas destrezas, especialmente en el manejo de la información, como buscar y transmitir conocimientos, por lo que “saber leer y escribir» es fundamental

 Elimina la exigencia de que profesores y estudiantes coincidan en el espacio y tiempo

 Exige un nuevo sistema educativo, es decir nuevas políticas educativas, nuevos procesos y métodos y materiales, que a su vez exige educadores especializadas en didáctica en redes

 Exige el reconocimiento del derecho universal a la educación también en el «tercer entorno». Toda persona tiene derecho a poder acceder a estos escenarios y a recibir una capacitación para utilizar las TIC

Por otro lado, investigaciones llevadas a cabo sobre el impacto de los medios y la tecnología en la enseñanza, han concluido que el modelo pedagógico tiene mayor incidencia que la tecnología usada. Diversos estudios recientes, (Balanskat, Blamire y Kefala, 2006; BECTA, 2007; Candie y Munro, 2007, citados por Area, 2008) concluyeron que a pesar del incremento de la disponibilidad de los recursos tecnológicos en las escuelas, la práctica docente en el aula no ha variado mucho del modelo tradicional, usando las TICs para apoyar más bien las pedagogías existentes, sobretodo las prácticas expositivas o de transmisión de información, lo cual no constituye una innovación al modelo de enseñanza (Area, Enero 2008). Siendo la utilización didáctica de las tecnologías en el aula más usuales:

 Apoyar las exposiciones magistrales del profesor en el aula

 Demandar al alumnado la realización de ejercicios o microactividades interactivas de bajo o medio nivel de complejidad

 Solicitar a los estudiantes que busquen información en Internet como si fuera una biblioteca

 Enseñar al alumnado competencias informáticas en el uso del software (por ejemplo cómo usar power point, diseñar pags. web, editar imágenes, etc.) Todo lo cual no representa una renovación pedagógica relevante, sin embargo, no deja de ser interesante de ser considerada en las estrategias pedagógicas utilizadas por los docentes para motivar el aprendizaje en los alumnos.